Desde mayo de 2025, los estudiantes extranjeros podrán trabajar legalmente hasta 30 horas semanales en España, incluso en sectores no relacionados con su formación académica. El país impulsa un modelo migratorio más abierto y adaptado a las nuevas realidades.
Un paso adelante en la política migratoria académica

España ha dado un paso clave en su legislación migratoria al aprobar una reforma que facilita la compatibilidad entre estudios y trabajo para personas extranjeras. El nuevo reglamento de la Ley de Extranjería, que entra en vigor este mes de mayo, busca eliminar obstáculos burocráticos y garantizar una mayor estabilidad legal para los estudiantes internacionales.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, confirmó que los estudiantes podrán trabajar hasta 30 horas semanales, incluso en áreas no vinculadas directamente con su programa académico. Esta medida responde a la creciente demanda de políticas más flexibles y adaptadas a la realidad económica y formativa de los migrantes.
Estudiar y trabajar: ahora compatibles legalmente
Uno de los cambios más relevantes del nuevo reglamento es que ya no será obligatorio que el empleo esté vinculado al área de estudios. Esto significa que un estudiante de diseño gráfico, por ejemplo, podrá trabajar en hostelería, comercio o atención al cliente, sin caer en irregularidades legales.
Además, se amplía la validez de la autorización de residencia por estudios para cubrir la totalidad del programa formativo, lo que evita que los estudiantes entren en situación irregular durante periodos de renovación o entre ciclos académicos.
Según la ministra Saiz, “es inconcebible que se pueda caer en una irregularidad sobrevenida. Esta reforma garantiza continuidad y seguridad para los estudiantes extranjeros en España”.
Un modelo que apuesta por el talento extranjero

La reforma no solo mejora las condiciones para quienes ya están en el país, sino que también facilita la permanencia una vez concluidos los estudios. Se establecerá una vía rápida para que los graduados puedan acceder al mercado laboral sin necesidad de regresar a su país de origen para tramitar un nuevo permiso.
“Uno puede venir a formarse en una materia y luego encontrar empleo en otra. Lo importante es que esté capacitado y que España pueda retener ese talento”, señaló la ministra.
Este enfoque busca retener perfiles cualificados y facilitar la inserción laboral en sectores estratégicos, aportando estabilidad y continuidad al proyecto migratorio de quienes eligen España como destino educativo.
Impacto económico de la migración en España

Actualmente, hay más de tres millones de personas extranjeras dadas de alta en la Seguridad Social en España. De ellos, uno de cada cuatro empleos es ocupado por migrantes y más de 500.000 son trabajadores autónomos, según datos oficiales del gobierno.
La presencia extranjera no solo es notoria en sectores tradicionales como la hostelería o la construcción, sino que ha crecido en áreas de alto valor añadido como tecnología, salud, educación y economía digital.
El modelo español se presenta como un “faro que da luz” en medio de un contexto internacional donde según la ministra “avanzan olas reaccionarias que denuestan la migración”.
Un enfoque más humano y funcional
La nueva normativa también ha recibido críticas por parte de algunas organizaciones que señalan que no amplía suficientemente las protecciones para solicitantes de asilo. Ante esto, el gobierno español ha aclarado que la reforma busca separar rutas migratorias por estudio o trabajo de aquellas que corresponden a protección internacional, con el fin de agilizar y no saturar los procesos de refugio, que deben destinarse exclusivamente a quienes enfrentan riesgos reales en sus países de origen.
Saiz recalcó la necesidad de combatir los discursos de desinformación y reiteró que España necesita talento migrante: “La migración tiene un impacto directo en la economía y en la sostenibilidad del sistema social. Por eso debemos generar rutas claras, seguras y eficaces”.
¿Qué deben saber los estudiantes internacionales?

Quienes estén pensando en viajar a España para cursar estudios en 2025 deben tener en cuenta los siguientes puntos:
- Se permite trabajar legalmente hasta 30 horas por semana durante el periodo de estudios.
- No es necesario que el empleo esté relacionado con el área académica.
- La autorización por estudios cubrirá toda la duración del programa, evitando interrupciones legales.
- Una vez finalizado el curso, habrá una vía directa para solicitar permisos de trabajo sin salir del país.
- Estos beneficios aplican tanto a programas universitarios como a formaciones técnicas o profesionales acreditadas.
España como destino académico: más competitivo que nunca

Con esta reforma, España se posiciona como uno de los países europeos más atractivos para estudiar y trabajar de forma simultánea. La medida busca atraer talento joven internacional, fortalecer su sistema educativo y responder a las necesidades de un mercado laboral en evolución.
En medio de una competencia global por estudiantes internacionales, esta estrategia convierte a España en una opción aún más atractiva, no solo por su calidad educativa y su idioma compartido con América Latina, sino también por su modelo migratorio más flexible y humano.
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Tomado de: Portafolio